Corrige el mal comportamiento de tus niños en 7 días | Ser Padres

Día 1: No reacciones

Tu primer movimiento siempre ha de ser determinar qué es lo que haces mal. De acuerdo con Ed Christophersen, Ph.D., psicólogo infantil clínico en el Children’s Mercy Hospitals and Clinics, en Kansas City, Missouri, “El error que la mayoría de los padres cometen es responder al mal comportamiento ya que atención negativa siempre es mejor que la total falta de atención”. Pero es normal que te preocupe lo que pueda pasar si les ignoras. El doctor Christophersen sugiere decirle a tus niños que desde ese día no vas  a hacerle caso a sus berrinches. “A partir de ahora si gritáis o empezáis una pataleta voy a hacer como si no estáis. ¿Entendido?”.
Verás como lloriquear y comportarse mal pierde interés si mamá lo ignora.

Día 2: mantén una actitud positiva

Dar por sentado que tus hijos se van a comportar mal hará que así sea. Si etiquetas a un pequeño como ‘malo’ o ‘caprichoso’, puedes estar segura de que le estás creando unos parámetros de comportamiento. Por ejemplo, cuando tu pequeño se enfade porque no quiere comer las judías del plato, prueba a decirle: “ayer te comportaste estupendamente y te comiste los champiñones, que también son verduras. Seguro que eres capaz de comportarte incluso mejor hoy”. Aprovecha también la ocasión para explicarle, con palabras sencillas, los beneficios de la dieta mediterránea. Los niños entienden más de lo que crees.

Día 3: Sé coherente

Lo siguiente es analizarte a ti misma y cambiar los malos comportamientos.  No hagas gestos o levantes la voz, si no quieres que ellos lo hagan. Si crees que hay algún aspecto de tu carácter que no puedes controlar, sal de la habitación cuando esté brotando. Pero piensa en solucionarlo a largo plazo. Trabaja mucho en el tono que utilizas, nunca debes perder los modos.

Día 4: Valida antes de disciplinar

Aunque en ocasiones parezca que tus hijos se comportan inadecuadamente solo para volverte loca, siempre hay un motivo detrás. “Por eso, deberías considerar los sentimientos que causaron el mal comportamiento de tu hijo para adoptar la medida más justa”, dice Gary M. Unruh, autor de Unleashing the Power of Parental Love.  “De esta manera, tu hijo se sentirá aceptado y entendido, incluso cuando es disciplinado”. Si ves que rompe algo de su hermano mayor dile: “debes estar muy enfadado con Luis para destrozar su juguete de esa manera”. Así, le das la oportunidad de explicarte por qué lo ha hecho. Y después, por supuesto, le castigarás porque lo merece.

Día 5: Consistencia es la madre de la ciencia

No permitas que la manera que tienes de lidiar con los problemas de tus hijos varíe en función de tu estado de ánimo. “Necesitas ser consistente, dejar tus expectativas claras y evitar tus propios arrebatos”, afirma Bertie Bregman, M.D., jefe de medicina familiar del New York Presbyterian Hospital. Si nadie se levanta de la mesa hasta que tu hijo termina de comer las verduras, no hagas una excepción un día porque tienes prisa.

Día 6: Siempre puedes establecer nuevos hábitos

Si te das cuenta de que sin querer has dejado que tus hijos adopten una rutina de ver la TV mucho por la noche, cambia las reglas. Diles a tus pequeños que a partir de ahora pueden ver la televisión mientras tú, o tu marido, preparan la cena. Al principio constará introducir este nuevo hábito, pero será para bien.

Día 7: Conviértelo en el Día de la Madre

Incluso Dios descansó el séptimo día, ¿no? Probablemente ahora mismo te estés riendo y pensando “las mamás nunca descansamos”. Y puede que tengas razón. Por eso, te animamos a que lo intentes de otra manera: prepara bocadillos y snacks (siempre teniendo en cuenta la importancia de la alimentación saludable), y lleva a tu familia a pasar un día en el parque. Tus hijos se entretendrán jugando entre ellos o con otros niños y tu podrás disfrutar de un poco de tranquilidad.

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